Descubrimientos coruñentos...

Hace unos días nos juntamos con amigos  en un nuevo local de A Coruña, un Tailandés. Tailandia me lleva rondando en la cabeza unos año, y aunque este no es el mejor momento para ir le tenemos muchas ganas. Por ahora me conformo con su gastronomía y las cosillas que me cuenta la gente de sus visitas a este país, aunque se me pongan los dientes mas largos....

Es el primer restaurante tailandés de la ciudad en pleno centro, a un paso del mar, con productos de calidad una carta amplia y con posibilidad de pedidos a domicilio. Es un local pequeño. No reservan pero tuvimos suerte, cuando llegamos se marchaba un grupo y en un momento teníamos mesa pasa 6.

El "problema" vino a la hora de decidir que comer. Tanto, tanta variedad y tan rico que parecia todo en la carta... Al final pedimos unos sticks de pollo con salsa de lima y unos rollitos thai para compartir. 

Después cada uno pido para sí. La opción mas demandada fueron los noodles en sus múltiples variedades: Pad woonsen (noodles de arroz fino con huevo, verduras y pollo), Pad thai dhrimps (noodles de arroz con tofu, zanahoria, brotes de soja, lima, chily, langostinos y tamarindo) y yakisoba thai style (noodle con verduras salsa de fruta y pollo)

  

Todo servido en unos cuencos de madera y con palillos. Hasta aquí todo perfecto. ¿La pega? las bebidas las sirvieron todas en vasos de plastico a excepción de un vino que lo sirvieron en copa y los cubiertos como alternativa para los mas torpones también eran de plástico.  No me va, si me lo voy a llevar a casa o es para comer en la calle vale, pero en el local NO!!!

Para los postres cambiamos de sitio que habíamos quedado con otros colegas. Tocó ir a El VALENTÍN

Lleva abierto muy poquito tiempo pero merece mucho la pena. Vale para desayunar o tomar unos cafés, tienen unos postres... pero también puedes comer o cenar. Su carta es amplia y aunque no probamos nada, los platos que vimos que se servían en mesas cercanas tenían una pinta increíble. Tienen menú del día muy currado a 9 euritos.

Además es super bonito y el patio de luces que hay al fondo le da un encanto especial. Por cierto se me olvidaba comentar que los perros son bienvenidos.

Una tarde de sábado lluvioso muy bien acompañados y muy productiva ;)